Identidad

Va revisando entre los libros y alcanza a romper tres adornos. Saca los cajones y da vuelta la cama. Después mira detrás de los cuadros. La ve siguiéndolo y la desviste…pero no está. Revuelve los cubiertos, tal vez entre las toallas, termina en el baño. Divisa la cartera y la vacía contra el piso. Se ha roto el perfume y corren las monedas. Por fin lo encuentra. Abriendo el documento descubre su nombre. La mujer sigue de pie, desnuda. Él lo escribe en un papel y se va, sin cerrar la puerta; ya no importa. Ella ha sido totalmente despojada.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La primavera

Éxodo

Como si no estuviera