Y prometo no volver

Esa mirada de mirar que me voy más lejos cada vez” 
O. Orozco

...uso esa mirada. Y prometo no pisar jamás esta casa que es nuestra. Y escupo por los ojos. Y cierro las siete puertas que nos separan de la vereda y empujo treinta y seis cuadras hasta dejar atrás este barrio que es nuestro. Me subo a las primeras cuatro ruedas que corren hacia el sur. Y miro al norte y me río. Te imagino llorando de ausencia. Y lloro a carcajadas. Te maldigo y te lo merecés. Y ya estoy tan lejos que ni preguntando por Roma hallarás mi rostro. Y nado hasta que las aguas se tornan frías y vuelo a donde el mapa se hace a tanteo (porque nadie puede dar fe de cómo son sus contornos). Y salgo al otro lado (porque siempre hay otro lado) y sigo riendo a mares... así, tan húmedamente.
Escapo hasta olvidar el nombre de los hijos que fueron mis padres alguna vez. Y ya ni sé quién soy. Camino. Y llego.
Y golpeo la puerta, y vos ahí diciéndome que es pronto, que todavía no me esperabas, que no hace ni diez minutos que prometía no volver a pisar esta casa nuestra. 



Comentarios

Entradas populares de este blog

La primavera

Éxodo

Como si no estuviera